En sus primeros días como Secretario General de la Corporación Municipal de Castro, Daniel Navarro enfrenta un panorama marcado por el traspaso de la educación pública al Servicio Local de Educación (SLEP) de Chiloé, deudas con proveedores y la necesidad de reestructurar la entidad para adaptarse a la nueva ley de compras públicas.

 

En entrevista con ChiloeNews, Navarro entregó detalles sobre estos desafíos y sostuvo que, a pesar de la compleja situación actual, “hay que tener una mirada un poco más positiva” respecto del futuro de la Corporación.

 

 

Según explicó Navarro, la nueva administración asumió hace menos de dos semanas y se encontraron con un escenario “bastante complejo”, en buena parte debido a la transición de la educación al nuevo SLEP. El Secretario General aseguró que el proceso se hizo de forma acelerada, ya que “por ley se debería demorar aproximadamente 2 años”. Sin embargo, en noviembre se informó a los alcaldes y el 1 de enero el servicio ya debía estar funcionando.

 

Otro factor que complica el escenario es que la ley de compras públicas cambió y ahora la Corporación también debe regirse por Mercado Público. “Se busca mayor transparencia, mejores precios para los servicios, pero eso también implica que tenemos que modernizar la estructura de la Corporación y adaptarnos a una condición de un servicio público”, señaló.

 

 

Navarro reveló que entre las principales tareas inmediatas está el saneamiento de las deudas con varios proveedores: “Nuestro primer apronte con el Concejo Municipal fue transparentar esta deuda (…) son deudas que están contabilizadas, con factura, y afectan a muchos de nuestros vecinos, empresas, etcétera”.

Al respecto, subrayó la importancia de consensuar con el municipio y los concejales la forma de saldar esos compromisos: “No es una empresa privada que sale a generar recursos; los fondos llegan de los programas de salud o eran de educación. (…) Todo lo que se quiera realizar con la Corporación, no sé, mantener algún servicio complementario, obviamente esos fondos tienen que ser municipales”.

En relación a la modificación presupuestaria rechazada por algunos concejales, la autoridad indicó que “vamos a transparentar el detalle de las deudas, porque son facturas que están contabilizadas, que tienen algunos muchos meses. (…) Lo importante es poder pagar las deudas”.

 

 

Consultado sobre la próxima presentación de la modificación presupuestaria, Navarro adelantó que “el día de mañana o a más tardar el lunes en la mañana, van a quedar ingresados los oficios (…) esperamos que el municipio coloque en tabla la primera semana de enero (…) para poder empezar a trabajar y empezar a sanear y ver cómo avanza esta corporación”. Asimismo, enfatizó que desde el 1 de enero la mayoría del personal ligado a la educación pasará al nuevo SLEP, lo que impactará la operatividad interna.

 

 

Otro gran desafío tiene relación con la propiedad de los terrenos donde se ubican escuelas y postas rurales, algunos de los cuales tampoco han sido subdivididos y ahora pasarán al SLEP. “Vamos a tener que ir a hablar con este servicio (SLEP) para que nos generen los comodatos (…) para poder postular a fondos públicos”, explicó Navarro.

 

La gestión de espacios como el Polideportivo o la piscina municipal también preocupa a la autoridad. Según señaló, “el desafío no es solamente económico, hay un desafío técnico. (…) Creo que con los lineamientos claros que el municipio nos entregue, la comuna va a poder salir adelante”.

 

A pesar de la premura en esta transición, Navarro hizo hincapié en el valor de reconocer la labor de profesores y asistentes de la educación que por décadas trabajaron en la Corporación. “Independiente de todo este caos, de los fondos, de la transición (…), debemos dar gracias a los maestros que nos educaron”, comentó.

Con ese objetivo, anunció la realización de un acto el 30 de diciembre en el Centro Cultural de Castro para homenajear a quienes dieron su vida por la educación municipal: “Queremos hacer un acto simbólico, (…) porque ellos no son un mueble que se traspasa de un dueño. (…) Creo que es importante cerrar este ciclo”.

 

Respecto de los trabajadores que no serán traspasados al SLEP, Navarro aclaró que parte del personal no cumplía las condiciones para migrar o no aprobó los concursos internos. Asimismo, advirtió que aún no se pueden concretar despidos mientras estén en proceso de postulación. De cara al futuro, se deberá evaluar su permanencia o eventuales indemnizaciones con el respaldo de la Municipalidad y el Concejo, dado que “la máquina va a quedar más pequeña (…) donde el principal capital humano, hasta el momento, es salud”.