En una operación clave para prevenir un desastre ambiental en las costas de Chiloé, buzos de la empresa Servomar sellaron con éxito los conductos de combustible de la barcaza «Maximiliano Andrés», siniestrada durante la jornada de ayer en las cercanías de la comuna de Queilen. La maniobra, destinada a minimizar el riesgo de derrame de hidrocarburos, fue confirmada esta mañana por el Gobernador Marítimo de Chiloé, Capitán de Navío Ricardo Cárcamo Pascual.

 

La operación se llevó a cabo a las 07:37 horas de hoy, 28 de mayo, cuando un equipo de buzos profesionales descendió hasta la barcaza. «El objetivo del buceo fue poder sellar los desahogos y la toma de combustible de la barcaza», explicó el Capitán Cárcamo. «Esto se hizo con el objeto de evitar y minimizar los riesgos ante un posible derrame de combustible», agregó la autoridad marítima.

 

El trabajo submarino, que tuvo una duración aproximada de 30 minutos, fue supervisado de cerca por personal de la Armada de Chile. «La faena fue verificada, registrada e inspeccionada por parte del Capitán de Puerto de Chonchi y la Alcaldía de Mar de Queilen», detalló el Gobernador Marítimo.

 

Con esta medida, la autoridad da por controlado un potencial foco de contaminación. «Puedo informar también que esto minimiza cualquier tipo de riesgo de que desde el interior de los estanques de la nave pueda fluir algún tipo de líquido contaminante al medio ambiente acuático», aseguró Cárcamo Pascual.

 

Los pasos a seguir se centrarán ahora en determinar las causas del naufragio y en la planificación para el rescate de la estructura. «El proceso a seguir durante los días posteriores es efectuar una inspección submarina para verificar y determinar el lugar donde ingresó agua para que la nave se hundiera», anunció el Capitán. «Posteriormente, se procederá con el plan de reflotamiento final para su traslado a un puerto seguro».