La mayor de la Primera Comisaría de Carabineros de Ancud, Cintya Sanhueza Riquelme, informó sobre la implementación de procedimientos policiales reiterados con el objetivo de aumentar la sensación de seguridad y la prevención de delitos en la comuna.

 

En este marco, se produjo la detención de tres mujeres de etnia gitana que protagonizaban desórdenes en la vía pública. La acción policial respondió a una denuncia ciudadana en el sector de Pudeto Bajo, específicamente en la calle Aníbal Pinto, donde las mujeres estaban solicitando dinero y obstaculizando el tránsito normal de peatones y vehículos.

 

Según detalló la mayor Sanhueza, al momento de la intervención policial, «estas mujeres que se encontraban efectuando desórdenes públicos […] se niegan a la detención y a su identificación también, lo cual también es un delito».

 

Las imputadas cuentan con un historial de antecedentes policiales que incluye delitos de robo por sorpresa, maltrato de obra a carabineros, hurto y porte de arma cortante. Tras su detención, quedaron a disposición del Juzgado de Garantía de Ancud para el correspondiente control y formalización de la investigación.

 

La comisario subrayó que estas detenciones forman parte de una estrategia proactiva para evitar que desórdenes menores escalen a delitos de mayor gravedad. «Las instrucciones están dadas por parte mía como comisario y el personal ya está con conocimiento de que esto va a ser constante para evitar también que exista una sensación de inseguridad por parte de la comunidad», afirmó.

 

Este procedimiento no es un hecho aislado. Se suma a la detención de otros cinco hombres de la misma etnia ocurrida durante la misma semana, también en el sector de Pudeto Bajo, por cargos de desórdenes públicos, porte de arma blanca y amenazas a personal de Carabineros en servicio. Las autoridades han reiterado su compromiso de actuar con firmeza cada vez que se sorprenda a personas cometiendo delitos o alterando la tranquilidad de la ciudadanía.