El presidente de la Asociación de Municipios de Chiloé, Marcos Vargas, alcalde de Queilen, ha elevado una fuerte crítica y preocupación contra el oficio 856 recibido de la Delegación Regional Presidencial, denunciando públicamente las discrepancias y el impacto negativo de este para la provincia.

 

Según el oficio, solo la provincia de Palena será declarada en crisis de escasez hídrica, dejando fuera a las provincias de Osorno, Llanquihue, y Chiloé. “Es una decisión errada e irresponsable”, proclamó el alcalde Vargas, declarando la indignación y preocupación de los representantes municipales de Chiloé.

 

La decisión implica que a partir de octubre, los municipios de Chiloé no tendrán la posibilidad de obtener recursos para el arrendamiento de camiones aljibe para la distribución de agua durante el verano, afectando sobre todo a los sectores rurales e insulares del archipiélago. Los alcaldes de la asociación subrayan el carácter crítico de esta resolución, sobre todo para las comunidades más vulnerables y la pequeña agricultura campesina, quienes dependen vitalmente de estos recursos, no solo para el autoconsumo sino también para sostener sus modos de vida.

 

En este contexto, los alcaldes de Chiloé han decidido unir sus voces y gestionar una audiencia con la Ministra del Interior, Carolina Tohá, buscando resolver la grave situación y discutir la crisis hídrica que también afecta a Chiloé. Exigen el cumplimiento del compromiso previamente establecido por la ministra Tohá en abril de este año, en relación a la provisión de camiones aljibe y estanques comunitarios individuales, así como el continuo apoyo gubernamental en el arrendamiento de camiones.

 

“Vamos a hacer todas las gestiones que estén a nuestro alcance para que se cumpla el mismo compromiso […] para llegar a decenas y centenares de familias humildes vulnerables que necesitan el vital elemento”, afirmó Vargas, haciendo énfasis en la urgencia de soluciones tangibles para las familias y la pequeña agricultura afectadas.